Teoría económica aplicada

Agosto... una pequeña ciudad de costa. Cae una lluvia torrencial desde hace varios días. A pesar de ser temporada alta, la ciudad parece desierta.

Todos tienen deudas y viven a base de créditos. Por fortuna, llega un ruso forrado y entra en un pequeño hotel de esos que llaman con encanto. Pide una habitación. Pone un billete de 100€ en el mostrador de recepción y se va a ver las habitaciones.

El recepcionista y propietario del hotel agarra el billete y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero.

Este coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos.

A su turno, el criador se apresura a pagar lo que le debe al proveedor de pienso para animales.

El del pienso coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta, a la que hace tiempo que no paga. En tiempos de crisis, hasta ella ofrece servicios a crédito.

La prostituta coge el billete y sale para el pequeño hotel donde había traído a sus clientes las últimas veces. Tenía pendiente un par de cuentas, así que le deja los 100€ al dueño del hotel y se va enseguida. De nuevo en el mostrador.

Justo en ese momento baja el ruso que terminaba de echar un vistazo a las habitaciones. Dice que no le convence ninguna, coge el billete y se va de la ciudad.

Nadie ha ganado un duro, pero ahora toda la ciudad vive sin deudas y mira el futuro con confianza.

Moraleja: Si el dinero circula, se acaba la crisis. ¡A gastar toca!

Gracias Agus.